Arquitectura e interiorismo: Ravetllat Ribas

Fuente: Ravetllat Ribas
Fotografía: Adrià Goula

El proyecto contempla la consolidación estructural y la restauración de la envolvente (fachadas y cubierta) de cuatro edificios del recinto de la antigua Caserna de La Remunta en Hospitalet de Llobregat, destinada a la cría de caballos por parte del ejército. De acuerdo con el Planeamiento aprobado por el Ayuntamiento, parte de este antiguo recinto se ha convertido en parque público mientras que algunos fragmentos se destinan a la construcción de nuevos bloques de vivienda. Todos los edificios objeto del proyecto quedan situados dentro del recinto del parque.

El conjunto del antiguo cuartel está formado por seis edificios, destinados a diferentes usos. El edificio 1 había sido destinado a cuadras de caballos y cantina en planta baja, y dormitorios de soldados y oficiales en planta primera. Los edificios 3 y 4, sólo de planta baja, eran destinados a cuadros de caballos. El edificio 5, de planta baja y piso, era destinado a enfermería y laboratorio. Los dos volúmenes que no son objeto de este proyecto son la antigua masía y el edificio 2, que alojará una guardería y será reformado según un proyecto independiente.

El encargo no conlleva la puesta en funcionamiento de los edificios, de los cuales se desconoce su futuro uso. De momento, se trata simplemente de garantizar su estabilidad y estanqueidad, con el fin de que no sufran procesos de degradación mientras se decide su destino definitivo y que sean compatibles con la utilización del parque.

Se decide no reforzar la cimentación pero sí actuar de forma sistemática en todos los edificios para drenar el terreno anexo a los cimientos. El criterio general ha sido, dentro de lo posible, el de consolidar y rehabilitar todos los elementos estructurales existentes. Se han mantenido todos aquellos elementos en buen estado y que garantizan unas sobrecargas compatibles con los usos más habituales. En buena parte de los edificios se ha introducido un cerco perimetral de refuerzo.

Las cubiertas inclinadas (edificios 1 y 5), se rehacen completamente manteniendo las encaballadas existentes. Se ha aprovechado para introducir aislamiento térmico mediante paneles sándwich con acabado visto de paneles de madera tipo. Se han recuperado buena parte de las tejas existentes para mantener el aspecto envejecido de la cubierta.

En cuanto a las cubiertas planas a la catalana (edificios 3 y 4), se han mantenido y renovado las capas finales con una nueva impermeabilización, acabado final de baldosas y formación de nuevos mimbeles.

En cuanto a las fachadas, la voluntad del proyecto es restituir el acabado original, repicando los revestimientos deteriorados o mal adheridos. Se han rehecho también los elementos decorativos malogrados, en especial los marcos de ventanas y cornisas. El acabado general de fachadas es un enlucido con mortero de cal y una pintura mineral al silicato. Las carpinterías son todas de nueva ejecución, hechos de madera de pino.