Arquitectura e interiorismo: MBM > La Casa del Patio. 1962

Fuente: Hogar y Arquitectura: revista bimestral de la obra sindical del hogar, N.62, p.18-23, Año 1966
Fotografía: Antiguas: Stefano Carlo Ascione | Actuales: Xavi Ru, Josep Ferrando

Ronda Guinardó 44, Barcelona | Oriol Bohigas, J. M. Martorell y David Mackay

La idea fundamental de proyecto es agrupar una serie de viviendas de pequeña superficie alrededor de un amplio patio central, dando a este patio, no el carácter de un simple pozo de ventilación, sino de un espacio de convivencia y circulación. La forma de este patio es Ia que simplemente resulta de colocar los mismos tipos de viviendas en sucesión ordenada, siguiendo aproximadamente los limites del solar. Este espacio resultante se ha tratado con el intento de obtener un cierto ambiente de plaza urbana.

Así, los distintos compartimentos se han fraccionado y diferenciado, intentando una fluyente continuidad de espacios, de manera que nunca aparezcan a Ia vez sus límites definitivos, con lo cual se tiene un poco la renovación de· Ia continuidad de una calle o de una sucesión de pequeñas plazas.

Asimismo, en el compartimento más amplio, se ha situado una pequeña fuente, que formalmente recuerda algunos elementos tradicionales de nuestros pueblos y que centra una posible vida comunitaria del conjunto.

Aparte de estas consideraciones de orden psicológico, este espacio central sirve (o servirá cuando los solares contiguos estén totalmente ocupados por otras casas) para el juego de niños, para las reuniones de los copropietarios agrupados en cooperativa, etcétera …

El resto del proyecto esta casi enteramente supeditado a esta idea fundamental. Otras dos consideraciones a tener en cuenta son: la necesidad de utilizar un tipo de vivienda que estaba ya experimentada con éxito en esta misma organización cooperativa y el deseo de utilizar hasta sus últimas consecuencias un sistema constructivo muy simple y económico (pared de ladrillo visto y estructura inferior de hormigón armado). Aplicando estos tres criterios, el resto del proyecto se resolvió casi automáticamente. La fachada, sobre todo, es un resultado casi no meditado. Seguramente, incluso, excesivamente no meditado, porque tiene quizás demasiada aridez y un punto de insultante desprecio a las posibles calidades formales de la calle.