jueves, 13 de agosto de 2020

Marc Sánchez > Extension of the Vatican Museums

| Marc Sánchez
| 2019 | MSc 1 | USI Mendrisio
| Professors: Pia Durisch + Aldo Nolli

El proyecto consiste en una ampliación de las salas expositivas del Museo Pio Clementino del Vaticano y se encuentra en la parte norte del complejo vaticano. El sitio, en deshuso actualmente, consta de lugares de almacenaje y un jardín y unas pistas de deporte no accesibles ni utilizadas.

Dada la presencia del Vaticano y el gran peso e importancia del Vaticano en la ciudad de Roma, el proyecto intenta pasar desapercibido, de manera que queda en su mayor parte enterrado y no impide la visión del complejo papal desde las calles circundantes. Asimismo, trata de aportar algo que ahora mismo se hecha en falta en el Museo Pio Clementino. De esta manera, se añaden salas minimalistas y amplias para contrastar con el actual espacio expositivo cargado de detalles y que acoge una gran densidad de personas actualmente.

Las obras de arte toman protagonismo ya que contrastan con el fondo de hormigón claro de la propuesta. Estas nuevas salas, de geometría diversa permiten al curador escoger diferentes ambientes donde presentar las exposiciones temporales, dado que tanto su forma es variable, así como la toma de luz que tienen. En su mayoría cuentan con lucernarios capaces de aportar luz directa en caso de exponer esculturas, o permiten cerrarse o tamizar la luz para obtener una luminancia menor, y en caso de necesidad se puede complementar con luminarias artificiales que cuelgan del techo mediante soportes metálicos integrados en la construcción.

La formalización de los espacios hace eco del Vaticano en su apariencia en planta, teniendo en cuenta proporciones de las salas existentes, pero explora diversas configuraciones volumétricas y lumínicas que en su día no eran posibles. Además, el sistema de dobles puertas permite organizar el museo de diversas maneras, alternando el orden mediante el cual se visitan las salas y por ende cambiando completamente la forma de percibir el museo, todo según la dirección del curador.

Del Vaticano toma también el espesor de los muros, dándole un nuevo uso moderno, ya que gracias a este espesor de 1,6 metros, permite hacer una doble pared de hormigón, confiriendo a todas las paredes el acabado deseado, además de permitir una fantástica conexión con la planta -1 que es prácticamente técnica. Gracias a este hueco de las paredes, todas las instalaciones y máquinas se colocan en el nivel inferior, y solamente los conductos de ventilación, agua y calefacción ascienden por las paredes. El uso del hormigón añadido al espacio vacío, permiten controlar climáticamente las salas gracias a estas paredes radiantes, liberando los planos horizontales y convirtiendo a estas paredes pesantes en elementos cruciales para el proyecto que sirven múltiples propósitos. El espesor de los muros, así como el tamaño reducido de las puertas, condiciona la cantidad de gente que puede entrar en el museo, reduciendo el número de visitantes y confiriéndoles un mayor espacio y tranquilidad. Además impiden la visualización de las salas siguientes, aislando al visitante y ayudando a que pueda apreciar cada obra individualmente.









Esta entrada aparece primero en HIC Arquitectura http://hicarquitectura.com/2020/08/marc-sanchez/

No hay comentarios:

Publicar un comentario